Elaboramos botellas serigrafiadas con un diseño muy exclusivo, ya que no llevan etiqueta, además de que algunas botellas de vino tinto son blancas y transparentes.
Las botellas de nuestra bodega se serigrafían en dos colores: en dorado, que está visible todo el tiempo, y del color del vino. Esta última plasma las construcciones del pueblo y, al igual que el caudal del río, se va haciendo visible cuando baja el nivel de vino en la botella. Podrás admirar el diseño por completo una vez consumido su interior.